Te busqué en el silencio de aquella noche
Cuando el sol ya descansaba en su cama
Cuando sus llamas no me servían de reproche
Y el frío hizo que el sueño me abandonara
Aun te sigo buscando esta mañana
Cuando la brisa reina y el sol ya aclara
Callado como el viento
Quiero entrarme debajo de tu almohada
Para acariciarte mientras duermes
Y darme en lujo de tocar tu piel de porcelana
Con tu respirar atizaste la llama
Que como volcán erupcionaba en mi alma
Tu mano fría me sirvió de invierno
Y me congeló aunque no nevaba
Se que como virgen estabas durmiendo
Mientras yo en mi verso te buscaba
Y cuando despiertes quedará el recuerdo
Del esposo triste que nunca llegaba.
2 comentarios:
Es hermoso, todo lo que aqui escribes, eres muy talentoso.
saludos
Oyeme Gato..!! Pero tu te inspiras muy bien. Me encanta el poema. Pasate por mi blog para que veas como rapa la mujer dominicana. Jajajaj
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